Ahora que ha llegado el 2015, me piden a menudo consejo sobre cómo empezar con la dieta paleo y el programa whole30.
Normalmente explico la parte relativa a la dieta, en cómo adaptarse de la mejor manera posible. Pero lo cierto es que paleo también tiene un componente emocional, porque paleo no es sólo alimentación, paleo es un estilo de vida, que implica estar bien contigo, moverse y vivir de forma más pausada.
De pronto se me vino a la cabeza, ¿con qué sentimientos definiría yo este estilo de vida? Me quedo con dos:
Paciencia
Para que se pase el mono de azúcar.
Para que tu cuerpo se adapte para funcionar con menos hidratos disponibles, y más con grasas.
Para que tu intestino “se estabilice”, y pasen la gastroenteritis y/o el estreñimiento.
Para escuchar que te vas a morir cada vez que digas a alguien que no comes pan.
Y para escuchar de vez en cuando que las grasas son el demonio.
Para aguantar el mes que tu pelo necesita para adaptarse al método no-poo.
Para leer la carta completa de un bar.
…la de tus acompañantes mientras la lees.
…y la del camarero que tendrá que relatarte los ingredientes de cada plato.
Para que tus gemelos y tus tendones se adapten a correr “barefoot”.
Para esperar 6 horas a que tu Crockpot termine de cocinar ese guiso que huele tan increíblemente bien.
Para confiar en que esas “cienes y cienes” de sentadillas sirvan para algo.
Paciencia para tener paciencia porque lo quieres todo Ya.
Paciencia porque no hay trampas, ni atajos…
Ilusión
Al comprobar que tus lesiones mejoran.
Porque la cabeza ya no te duele tanto.
Porque duermes mejor.
Cuando tus seres queridos buscan restaurantes con parrilla de carne y verduras, para que tengas donde elegir.
Al escuchar “oye, he empezado con la paleo, y me está funcionado genial”.
Porque resistes sin problema los entrenamientos y te recuperas antes físicamente.
Porque ya no te duelen las rodillas cuando corres.
Porque el ritmo lento de la vida paleo hace que te tomas los problemas con más calma.
Porque en tu piel ya no hay rastro de granos y tu pelo brilla.
Y tu cuerpo se estiliza y tu culo le gana la batalla a la gravedad.
Porque para entrenar y estar en forma sólo necesitas tu cuerpo y 20 minutos al día.
Cada vez que te cargas de energía cuando pisas la hierba descalza/o.
Y cada vez que sale el sol y sientes el calor en la cara.
Y tu, cómo definirías la dieta paleo?
Gabriel says
Que bonito Vane, me ha gustado mucho este post. Hoy toca además ayuno y me viene de perlas que no aparezca una fotaca de un superplato delicioso.
Yo la definiría también como cambio. Porque a mi me cambió la vida,pasé de pedir ayuda cada vez que tenía que buscar algo por la parte baja de mi casa, porque no podía ponerme en cluquillas, a hacer sentadillas, de no poder correr a hacerlo cuando me apetece de no perder un dolor lumbar persistente a hacer peso muerto todas las semanas( record 100kg). De tener dificultades para dormir a quedarme frito fácilmente a luchar contra mi “barriguita” a perderla. De quedarme solo en las habitaciones cuando mi intestino “liberaba” gases a que no se note lo mas mínimo.Pasé de una talla 44 a un 40/38 , es por todo esto que añado a tu lista la palabra CAMBIO.
Es verdad que hay que tener muuuucha paciencia, yo casi he renunciado a discutir y defender la Paleo en reuniones creo que a la larga la gente no es tonta y cuando pasan los meses y te sigan viendo delgado y en forma y ellos sigan gordillos y cansados igual se lo plantean y recapacitan.
salu2.
Vanessa Díez says
Buenos días, Gabriel.
Más que cambio, tu vida ha dado un vuelco fantástico.
Es increíble que la comida pueda ser algo que te arruine la salud o sirva de medicina, ¿verdad? Y moverse, moverse es fundamental.
Cómo me alegro de que decidieses investigar y cambiar tu vida.
Un abrazote y muchas gracias 🙂
Isa says
Yo también te voy a contar todo lo que he aprendido.. Ya llevo un año de paleo y lo primero es agradecértelo a ti. Al leerte, al escucharte, al hablar contigo y al sentir que crees en lo que haces me contagiaste tu entusiasmo y tu interés.
Lo mas importante que he aprendido ha sido a reconciliarme con mi cuerpo y con mi salud.. Toda la vida con niveles bajísimos de anemia y cansada por no saber comer, porque el medico me recomendaba lentejas y cereales ( porque tienen 8 vitaminas y hierro) y sin todo eso y con paleo llevo un año sin anemia, sin altibajos a ese nivel y sin una sola pastilla.
He aprendido a cuidarme, a saber lo que como, a disfrutar de la comida paleo y no paleo… Cuando toca y apetece como lo que se me antoja, pero siendo consciente de ello. Ya no me preocupo de engordar o de dejar de hacerlo.. De si tomo grasas o no…
He aprendido a que mi cuerdo se construye de lo que comemos.. He perdido kilos, he ganado fuerza, he estilizado mi cuerpo…se me cae muchísimo menos el pelo, esto era mi gran desesperación y preocupación.
Todo con paciencia y despacio, pero lo que he ganado no lo he perdido en todo el año… Con todo esto he aprendido a gustarme y a valorar mis cambias.
En definitiva,para mi paleo me ha enseñado a estar tranquila con mi cuerpo y con mi alma y a estar feliz con la comida!!
Yo lo recomiendo 100% pero no como una dieta sino como una forma de vida….
Gracias por todo Vane!!
Vanessa Díez says
Hola Isa,
muchísimas gracias por compartir tu experiencia con nosotros.
Es brutal el cambio en poco tiempo que he visto en ti desde que comenzaste la dieta paleo (todavía recuerdo cuando me decías que tenías bolsas de chuches en casa :D)
Y tanto que estás más esbelta! Pero lo que más me alegar es verte con más energía en los entrenamientos, y más alegre! Y con esa buena cara!
Muchas gracias por confiar en mi, compi!!
Un abrazote!
Ferranfe says
Hola, quiero empezar el whole30 pero trabajo de 7,30 a 15 con pausa para el bocata. Veo complicado lo d hacer 3 comidas desde las 6 que me levanto hasta las 10 sin comer. El libro no está en español?un saludo
Vanessa Díez says
Hola Ferranfe,
no,el libro no está en español, pero en su web tienen algunos textos en español.
Ellos recomiendan comer 3 veces al día, pero seguro que se puede adaptar a cada uno. ¿Lo dices por comer cada 8 horas? En mi caso, desayuno a las 6.30 (también entro temprano a trabajar), almuerzo a las 14 y ceno sobre las 22. Si comes suficiente, llega un momento que no pasas hambre.
Un saludo.
Arantxa says
Hola a todos!!
En primer lugar Vanessa darte las gracias por tus consejos y recetas que me van ayudar seguro en esta aventura que empiezo hoy para estar sana y más saludable. Estoy cansada de mirarme al espejo y ver a una persona que no me gusta. Cansada de que el ejercicio no se note y que cada vez que me pongo en la cinta no aguante más de 3 km y haciendo auténticos esfuerzos para conseguirlo. Cansada de que me duelan las rodillas y que me diga el médico que como no pierda peso y fortalezca los huesos en pocos años tendré una gran artrosis. Cansada de comer con ansia y glotonería ya sea dulce o salado… Por todo esto he decidido poner un gran punto y aparte y empezar a cambiar mi forma de pensar y de alimentarme sobre todo en los desayunos 🙂 Ya os iré contando si lo consigo!!
Vanessa Díez says
Claro que lo conseguirás. Estoy seguro porque vas a comenzar con la mejor motivación que puede haber: tu salud.
Mucho ánimo! Y ve contándonos.
Un abrazo 🙂