Hace unos días, han comenzado a comercializarse unas nuevas barritas con ingredientes únicamente paleo, aunque son aptas también para aquellos que siguen dietas vegetarianas/veganas.
Y los amigos de Anastore han tenido a bien hacerme llegar una caja para que las pruebe y de mi opinión sobre ellas.
Por mi parte, he pedido también opinión a mi amiga Mar. Como todavía no está muy convencida de las ventajas de la dieta paleo, he recurrido a una medida desesperada: sobornarla con estas barritas energéticas.
“Saben a pan de higo, pero el toque de los frutos rojos dehidratados le da un punto original. Me gustan, están ricas”.
Efectivamente, los principales ingredientes de estas barritas son: Higos secos (60%), dátiles deshuesados (12%), frutos secos 17,5% (almendras con piel crudas, avellanas tostadas, nueces crudas), frutos rojos liofilizados 10,5% (arándanos rojos, frambuesas, moras).
Cómo puedes comprobar, todos naturales y todos paleo.
A mi me han gustado, porque este tipo de barritas suelen ser dulces en exceso, los frutos rojos liofilizados le dan un toque ácido muy fresco y original.
Me llama también la atención que son bastante sólidas al tacto, nada pringosas, y el tamaño justo para saciarse sin ser empachosas (son muy densas, comerse dos seguidas es complicado).
La verdad es que no soy muy partidaria de usar este tipo de snack muy a menudo, y menos si desplazan a otros alimentos dentro de tu dieta, pero sí creo que son una muy buena alternativa para llevar en la mochila si vas de excursión o pasas todo el día fuera de casa.
Eso sí, en cuanto cayeron en mis manos, se abrió ante mi todo un mundo de recetas que hacer alguna receta con ellas 😉
- 2 barritas paleo crobar o bien,
- -- 3-4 dátiles (opcional)
- -- 40 gr. de frutos secos (opcional)
- -- ½ cucharadita de esencia de vainilla (opcional)
- 1 lata de leche de coco (400 ml.), yo uso de marca aroy-d, que es la más cremosa que he probado.
- 4-5 cucharadas de algarroba molida, que ya es dulce y no necesita edulcorante.
- Si no, puedes usar 4 cucharas de cacao en polvo y 1 cucharada de azúcar de coco
- La noche anterior, guarda una lata de leche de coco en la nevera, no te olvides 🙂
- Si te has decidido a probar las barritas:
- Al día siguiente, parte en dos mitades cada barrita Crobar, y haz una bolita con cada una de las partes.
- En un molde para muffins, aplasta cada bolita hecha en el paso anterior y aplástalo con las manos. Será la base de nuestra tartaleta.
- Reserva en la nevera.
- Si no, mezcla los dátiles, los frutos secos y la esencia de vainilla en un procesador de alimentos. Bátelos en un procesador de alimentos unos minutos hasta que mezclen bien.
- Reserva en la nevera.
- Vamos con la mousse:
- Normalmente, al refrigerar la leche de coco, la parte cremosa de la leche queda en la parte de arriba, y el agua de coco en la parte de abajo.
- Al día siguiente, con una cuchara, coge la crema de coco y ponla en un bol. Mezcla con la algarroba o el cacao/azúcar de coco.
- Si ves que, está demasiado denso, puedes añadir un poquito de agua de coco de la lata.
- Saca de la nevera el molde con las bases de las tartaletas, y vierte la mezcla de coco y chocolate.
- Guarda las tartaletas en el congelador. Al menos media hora para que queden más firmes.
- Pasado ese tiempo, puedes guardarlas en la nevera sin problema.
- Espero que te guste la receta 😉
Mariluz says
Que pinta más buena!
Vanessa Díez says
Gracias Mariluz 🙂