Hace unos días me indigné muchísimo.

No suelo molestarme porque creo firmemente en los beneficios de seguir una dieta sin gluten y sin azúcar, pero hay veces que la gente llega a faltar el respeto tratando de defender el modelo dietético actual, ya sabes, “0% grasas”, “para adelgazar lo único que funciona es restringir las calorías”, etc.

Le sucedió a mi querida amiga bloguera el otro día. En su blog “Dulce, Sano y natural”, en el que publica unas recetas sin gluten deliciosas, una persona denominada a si misma “indignated” la acusó de poner en peligro la vida de la gente por recomendarles eliminar de su dieta determinados alimentos sin ningún argumento científico.

En serio, ¿recomendar un estilo de vida y de dieta natural es poner en peligro la vida de alguien? ¿Qué bueno me aporta el azúcar químico que no me aporte la fruta? ¿Qué bueno me aportan los cereales que no me aporten las verduras? Lo siento, pero:

Nadie muere de un déficit de pan.

Yo no pido que nadie crea ciegamente en la dieta Paleo, pero infórmate, duda de todo si hace falta, lee a médicos y  bioquímicos como Robb Wolf, Lauren Cordain, Barry Sears que se han atrevido a cuestionar lo establecido, y sobre todo conoce tu cuerpo y cómo influye en ti lo que comes.

En el próximo post, explicaré qué beneficios he obtenido de la dieta paleo a lo largo de estos meses, y por qué la recomiendo con entusiasmo 😛

Y para demostrar al mundo, lo restrictiva y durísima que es la vida paleo, os traigo la receta de hoy:

Ingredientes (2 personas).

• Un solomillo de cerdo.
• 1 boniato
• 2 plátanos maduros
• 1 pizca de sal.
• 1 cucharada de ghee (o aceite de oliva)

Preparación .

• Ponemos una cucharada de ghee a fuego lento en una sarten.
• Pelamos el boniato y lo cortamos en cuadraditos. Los envolvemos en un film transparente, le hacemos agujeros al film y lo metemos en el microondas durante 5 minutos (*).
• Picamos los plátanos, y los añadimos a la sarten cuando esté templada.
• Cuando estén doraditos los plátanos, los sacamos de la sarten y los ponemos en un vaso para batir, al que añadiremos también el boniato cuando esté blando.
• Batimos hasta que no queden queden grumos.
• Subimos el fuego de la sarten y cuando esté muy caliente, ponemos el solomillo cortado en rodajas en el fuego hasta que estén sellados.
• Para servir el plato, ponemos una base de plátano y boniato, y ponemos encima los solomillos.

Espero que os guste!

(*) No es mi método favorito de cocinar, pero sí el más rápido