Llámala dieta paleolítica, dieta evolutiva, dieta de tarzán… o esa-mierda-dieta-que-no-te-deja-comer-pan-con-lo-rico-questá.
He leído mucho sobre ella, y lo que me queda claro es que una dieta estricta en el sentido de que te obliga a comer esto y lo otro, si no que es una plantilla que cada persona adapta a sí mismo y a sus necesidades nutricionales. Por ejemplo, hay personas que comen queso, otros que no comen frutas, pero en resumen, hay algunos pilares básicos:
– Elimina el azúcar de tu vida. Hazlo ahora, no dudes ni por un momento: inflamación de tejidos, migrañas, diabetes,adicción, …
– Elimina el gluten presente en los cereales. Cada vez más estudios vinculan su consumo al síndrome del intestino permeable, enfermedad de crohn, síndrome de Hashimoto… Una joyita.
– Las legumbres, tan ricas y nutritivas, tan propias de la dieta mediterránea y tan cargadas de antinutrientes, que no sólo no te dejan asimilar sus buenas propiedades, si no que si te descuidas te roban calcio… las mú put*s.
– Repite conmigo: las grasas son buenas, las grasas son buenas, las grasas son buenas… bueno, al menos las de origen animal y vegetal.
– Y en general, elimina de tu vida alimentos procesados, come lo más natural posible… y por tu madre, lee bien las etiquetas de los productos.
¿Qué que comes entonces? Pues está claro: bicho que vuela, nada o corre, a la cazuela, acompañado por todas las verduritas del mundo… y de postre, fruta ! ¿A que mola? ¿Eh? ¿Eh?
Mi vida paleo
Llevo años intentando comer más o menos “sano” , es decir, durante años he tenido un pánico atroz a las grasas.
Era feliz comiendo mi pechuguita de pavo, mis tortitas de maíz, mis yogures 0%…
Y durante todos estos años, no he podido entender por qué me daban ataques de ansiedad y sin venir a cuanto, me zampaba cualquier cosa con chocolate que se me pasara por delante, ni por qué tenía esa maldita la keratosis pilares en brazos y muslos.
Con el deporte, lo mismo: corría y hacía alguna rutina de las de www.bodyrock.tv, pero ahí seguían mi culo flácido y mi barriguita de bebé.
En agosto del año pasado empecé con el crossfit y de ahí a la dieta paleo, por fin convencida de que un gran % de los resultados de entrenamiento dependen de la alimentación.
¿Es duro? No, duro es dejar de fumar… Sí, claro, cuestan sobre todo el eventos sociales… y en este país, que sales a tomar cañas, y todo viene acompañado por pan.
A mis personas cercanas les explico, con mucha paciencia y con mucho cariño que lo hago porque es bueno para mi salud, y por lo general me entienden (la niña siempre ha sido un poco tíkismikis con la comida, déjala déjala)…
A otras, a las que sé que no me van a entender, lo único que nos queda es armarnos de paciencia. No intentes justificarte ni dar lecciones a nadie que no las quiera escuchar, porque es malgastar saliva. Es mejor, te facilitará la vida y ahorrarás saliva, porque a veces resulta difícil incluso siendo celiaco o diabético.
Autores a seguir:
- Robb Wolf
- Maelan Fontes.
- Carlos Pérez
Hola! Te leo y es como mirarme en un espejo hace unos 10 meses 😀 Hasta con lo de BodyRock! Quiero decirte algunas cosillas:
1- No, el queso no es paleo, ningún lácteo con excepción de la mantequilla (pero ya sabes, sólo de vacas criadas en libertad blablabla…)
2- BodyRock ha cambiado tanto que ya ni entro, has visto la web de Zuzana? http://zuzkalight.com/category/workout/ Están geniales sus rutinas, yo hago esto ahora 🙂
3- Vale, no se “puede” comer pan, q está mu rico… Pero no cambio el pan por el bacon que sí que comemos 😛
4- Por último, dale una ojeadita ami blog con recetas paleo e información sobre ello 😀
Saludos!!
Hola!
Muchas gracias el comentario y los consejos!
Opino lo mismo de bodyrock, se han pasado muchísimo y me encanta Zuzana, mucho más sencilla y bueniña.
Me encanta tu blog por cierto! Ya lo tengo entre mis favoritos para las recetas
Ya mismo lo agrego por aquí al wordpress.
Un abrazo
Gracias bonica! Pues nos vemos por los blogs 😀
Uy, he olvidado linkear el blog 😛 http://antojamenesdelascavernas.wordpress.com/
Hola!
¿Qué carajo hago escribiendo aquí? Pues bien, supongo que busco información, ánimos, convicción, fuerza de voluntad…o todo lo contrario. Hace días que le voy dando vueltas a esto de la paleodieta. Yo, adicta al chocolate, encantada con los bizcochos que hago, panarra hasta la médula…Yo, que soy de las que pago gimnasio por aquello de “algún día iré”, que siempre encuentro una excusa para no salir a correr…Yo, con tendencia a engordar, con esos tres o cuatro kilos que no hay manera de sacarlos de encima porque que me consuelo con los 8 quilos que perdí el año pasado después de portarme muy, muy bien.
Entonces,¿ qué carajo hago aquí?
Resulta que hace tiempo que no estoy bien. Me siento hinchada, me duele la boca del estómago cuando como…total, me siento incómoda con mi cuerpo. Son cosas que me han hecho pensar. Eso y convivir con un triatleta que hace casi dos meses que sigue la dieta paleo y que está encantado de la vida. ¿Pero cómo puede vivir sin pan? ¿Sin pasta? ¿Sin chocolate? ¿Renunciar al bocadillo de la mañana y al cafelito? pues él puede. Ya no son los tres quilos que ha perdido (que tampoco le sobraban, la verdad), sino la sensación de bienestar que dice sentir. Todo esto me ha hecho pensar. De hecho, ha sido él quien me ha remitido a este blog. Y aquí estoy! empiezo? no empiezo? ¿es natural renunciar a los pequeños placeres de la vida? ¿me encontraré mejor, pero seré una infeliz? ¡Sufriré seguro! En este punto me encuentro, ya veis. Tengo ganas de hacer un cambio, pero no sé si éste es el camino: sin cereales, sin azúcar, sin legumbres, sin lácteos… Alguien me puede aportar algo de luz?
Ya os contaré. Un abrazo.
Hola Vanessa!
En primer lugar: sí,estás en buen camino. No porque el triatleta te lo diga, si no porque te lo estás pidiendo tu cuerpo.
Yo a veces pienso igual que tú, sobre todo cuando salgo de casa a tomar algo con los amigos. Pienso exactamente lo mismo: buah,si la vida son dos días, si por un día que pruebe esto no pasa nada… y a veces pico, vienen las consecuencias, sobre todo hinchazón, diarrea (perdón) y falta de energía.
El problema es que nos recompensamos o premiamos sin motivo. Quiero decir: qué hemos hecho para ganarnos ese bizcocho o ese chocolate? ¿Hemos corrido, hemos entrenado, perseguido un mamút? Eso es lo que nuestro cuerpo entiende como recompensa…pero no “he tenido un mal día” y me como un huevo kinder… Con eso sólo conseguimos una adicción de nuestro cerebro a la comida fácil.
Créeme que en cuanto suprimas algunos alimentos te sentirás mejor. No te voy a decir que vaya a ser fácil. Incluso en algunos momentos, odiarás a ese triatleta porque a los hombres la dieta paleo les funciona increíblemente bien…pero sí, merece la pena.
Con el tiempo dormirás mejor, te notarás menos hinchada…
Mi recomendación, quitar en primer lugar azúcar y cereales. Notarás unos días un monazo bastante serio, y puede que algún desarreglo intestinal.
Si notas mucha hinchazón, mi experiencia es que no consumas más de un 25% de vegetales/frutas (limita los almidones). Yo uso la aplicación myfitnesspal, que te vendrá muy bien al principio para acostumbrarte.
También decirte que la comunidad paleo en España ya es bastante fuerte, y encontrarás mucho apoyo (también algún radical), pero si necesitas consejo no dudes en preguntarme(nos).
Un abrazote y mucho ánimo.
¡por fin! Alguien que si sabe.. buscaba mucho info de lo paleo, es que yo realmente necesito cambiar mi comer “no lo negaré, pero me encanta la comida”; Supe por ahí que en Corea se come mucho paleo, su gastronomía es 100% paleo; Y bueno es algo dificil conseguir todo eso en mi país, pero a lo buen chileno igual quiero intentar; Gracias por compartir “Lista de la Compra”. Mi mamá lo necesita mucho igual que mi tia, ellas dos ¡rompen las reglas! siempre.. Y yo, yo igual.. me gusta mucho las cosas dulces y me tiento muy fácil. Pero hace mucho tiempo que estoy comiendo paleo y hacia rutinas de UFC, he perdido un poco las esperanzas porque hago todo sola, y bueno es aburrido cuando no hay audio. Pero de igual manera quiero seguir comiendo bien hasta el 100% por ciento si es necesario, para darle un buen ejemplo a mi hijo Kevin. Gracias, ahora sigo su página. La leeré a menudo. ¡Saludo desde Chile!