¿Alguna vez has probado el té pakistaní? Es uno de mis tés favoritos.
Recuerdo que cuando estudiaba en el instituto quedaba con mis amigas los sábados por la tarde e íbamos a la Calle Calderería, más conocida como la Calle de las Teterías en Granada. Situada en el Albayzin bajo, estrecha y muy peculiar por su arquitectura, está plagada de locales donde disfrutar de un delicioso té, acompañado de unos pastelitos árabes: La Alfaguara, La Pervane, Abaco, cualquiera de ellas es buena para tomarse una infusión.
Eso sí, ni son paleo, ni paleo friendly, “ni ná”
De hecho, están llenas de trampas: las mayoría de las infusiones no suelen tener azúcar, sólo el clásico té moruno con menta viene preparado con azúcar desde la cocina a tu mesas. Y los pastelitos… ¡ay, los pastelitos! No confiaría en que sus ingredientes cumplan las reglas de la dieta paleolítica 🙂
Incluso el té pakistaní, se usa leche para intensificar su sabor especiado, algo que a día de hoy, he tenido que abandonar definitivamente, porque no la tolero. Aunque sí que continúo usando las especias que se usan en su preparación:
- Canela, ayuda a reducir los niveles de glucosa en sangre, es antiinflamatorio, alivia los síntomas del resfriado, favorece las digestiones.
- Clavo, posee propiedades antibacteriales, anestésica y analgésicas (contiene eugenol) , antiespasmódicas y estimulantes (en aceite esencial se usa para tratar contracturas musculares).
- Cardamomo, es digestivo, alivia los gases, alivia el dolor de las hemorroides, etc.
- Vainilla, una sustancia analgésica y aséptica (contiene también eugenol), tiene propiedades antidepresivas (contiene hidroxibenzaldehido), tiene propiedades sedantes, etc.
Como en la receta que os traigo hoy, un postre paleo muy sencillo de preparar: una pequeña indulgencia para quitarnos el ansia por el dulce.
Ingredientes (preparación 30 minutos)
- 1 calabaza mediana (aprox. 300 gr )
- 1 canela en rama
- 1 cucharada sopera de canela en polvo
- 1 cuchada pequeña de cardamomo
- 1 cuchada pequeña de clavo
- 1/2 vaina de vainilla
- 1/2 taza de ghee, mantequilla o aceite de coco
- 2 cucharas soperas de miel o una taza de dátiles sin hueso troceados
Preparación
- Pelamos la calabaza, quitamos las pipas y la cortamos en trozos.
- En una olla grande, ponemos todas las especias y añadimos dos vasos de agua.
- Yo prefiero no cocer la calabaza en este caso porque queda demasiado líquida, así que la he cocinado usando una olla al vapor. Si no tienes ninguna en casa, puedes usar un colador grande:
- Tras 20 minutos a fuego medio, y si se puede pinchar con un tenedor, saca la calabaza de la olla ponla en un recipiente apto para batir junto con cucharada de canela en polvo y los dátiles (en caso de que hayas escogido en lugar de la miel).
- Cuando compruebes que no quedan pedazos ni brumos, vuelve a colocar la calabaza en una olla, en la que no queden agua ni especias y añade la miel si no has usado antes los dátiles.
- A fuego lento, remueve hasta que empiece a hervir y estén bien mezcladas la calabaza y la miel.
- Añade el ghee/mantequilla/aceite de coco y remueve hasta que se disuelva completamente, en caso de estar solido.
- Una vez que esté todo bien mezclado, aparta la olla del fuego y deja que se enfríe.
Espero que te guste la receta 😉
Francisco says
A la perdición!!! Nos vas a llevar a la perdición!!! jajajajaja
Vanessa Díez says
jajaja, hacía la luz no, al otro lado! :))
Gabriel says
Ya he apuntao en el móvil el cardamomo que no tengo, la canela y la vainilla como imaginarás, mi chica la del roscón tiene bien surtida la casa. ¿ Como te la comes? A cucharadas?, la añades a algo? la untas en tortitas de trigo sarraceno?
Abrazos
Vanessa Díez says
Holaaa,
ya imagino que tu hija tendrá un armario de ingredientes interesante, jajaj Eso sí que son tentacions :))
Pues mira, como salió bastante cantidad, algunas veces a cucharadas y para un desayuno hice unas tortitas con harina de coco (no he usado aún el trigo sarraceno). Un vicio 😛
Un abrazo.
Petro says
Que buena pinta!!!! lo de los dátiles para endulzar me parece una idea genial!
Vanessa Díez says
Hola Petro,
muchas gracias 🙂
Suelo usar dátiles par endulzar, porque la miel en personas con diabetes tiene el mismo efecto nocivo, además se prohibe en el programa whole30.
Ahora quiero experimentar a endulzar con manzanas asadas, a ver qué tal el experimento 🙂
Un abrazo.
Diana says
Tengo de todo en casa, así que hoy mismo la preparo y mañana para desayunar con unas fresas… Mmmmm!!!!
Que recetas más fabulosas públicas!
Vanessa Díez says
Que rico con unas fresitas, me encanta.
Muchas gracias, Diana 🙂
Rosa says
Perfecto. Tiene una pinta … Lo haré como alternativa a la mantequilla de manzana que hago para echar por encima de un brownie paleo y darle un poco de dulzor.
Mi marido sobre todo te lo agradece. Gracias.
Saludos
Vanessa Díez says
Hola Rosa,
La mantequilla de manzana tiene riquísima también. Quiero probar un día a hacerla con la crockpot :))
Y con el brownie, que rico!
Muchas gracias a ti.